Baptisterio

Artículos del Credo

El Credo desarrolla un rol fundamental en el rito del Bautismo: sintetiza en efecto la profesión de fe en la cual adhiere el catecúmeno. A pesar de que se trata de un tema bastante inusual en la pintura italiana, Siena conoce una gran difusión, como atestiguan el coro taraceado de la capilla al interior del Palacio Público, realizado entre el  1415 y el 1428 por Domenico de Niccolò de los Cori, y los frescos de la Capilla del Sacro Chiodo en el Hospital de Santa Maria de la Scala, realizados en el 1449 por el mismo artista que en el año siguiente pintó los Artículos del Credo en el Batisterio: Lorenzo di Pietro llamado el  Vecchietta.

El Credo ilustrado en el Batisterio no corresponde al Símbulo niceno (es decir lo rezado durante la Misa), sino a la fórmula más sintetizada del Símbolo apostólico. Los frescos ocupan las tres bóvedas contiguas a la pared en el fondo del edificio; las escenas, correspendientes cada una a un Artículo del Credo, son doce, cuatro para cada bóveda, a partir de la de izquierda; su succesión sigue un desarrollo a partir de la izquierda. Cada bóveda de cruceira contiene la representación de un Artículo, está acompañada en un rincón abajo a la derecha, por un apóstol y, en la  izquierda por un profeta reconocibles por las escritas que acompañan a los distintos personajes y por las inscripciones de los papelitos. En un sermón atribuido al  Pseudo Sant’Agustín, del cual en la Edad Media se conocía la autenticidad, a cada uno de los apostoles se atribuía un artículo del Símbolo apostólico.

En cada bóveda hay una representación de un fiel, en rodillas, con las manos juntas, en el gesto de rezar el Credo. A parte la primera escena, donde las letras han caído, en las otras bóvedas en correspondencia de la boca del hombre, ocupado en rezar, se delínea la inscripción en letras capitales : “CREDO”.